LA EMPRESA
Una empresa es una organización, institución o industria, dedicada a actividades o persecución de fines económicos o comerciales, para satisfacer las necesidades de bienes y/o servicios de los demandantes, a la par de asegurar la continuidad de la estructura productivo-comercial así como sus necesarias inversiones.
Se ha notado que, en la práctica, se puede encontrar una variedad de definiciones del término.
Definiciones
Así,
se puede considerar que una definición de uso común en círculos
comerciales es la siguiente: “Una empresa es un sistema con su entorno
materializa una idea, de forma planificada, dando satisfacción a
demandas y deseos de clientes, a través de una actividad comercial".
Requiere de una razón de ser, una misión, una estrategia, objetivos, tácticas y
políticas de actuación. Se necesita de una visión previa, y de una
formulación y desarrollo estratégico de la empresa. Se debe partir de
una buena definición de la misión. La planificación posterior está condicionada por dicha definición.
La Comisión de la Unión Europea sugiere la siguiente definición: «Se considerará empresa toda entidad,
independientemente de su forma jurídica, que ejerza una actividad
económica. En particular, se considerarán empresas las entidades que
ejerzan una actividad artesanal u otras actividades a título individual o familiar, las sociedades de personas, y las asociaciones que ejerzan una actividad económica de forma regular».
De acuerdo al Derecho internacional, la empresa es el conjunto de capital, administración y trabajo dedicados a satisfacer una necesidad en el mercado.
Un diccionario legal de EE. UU. las
define como: “an economic organization or activity; especially: a
business organization” (una organización o actividad económica;
especialmente una organización de negocios).
Otra definición -con un sentido más académico y de uso general entre sociólogos- es: “Grupo social en el que a través de la administración de sus recursos, del capital y del trabajo, se producen bienes o servicios tendientes a la satisfacción de las necesidades de una comunidad. Conjunto de actividades humanas organizadas con el fin de producir bienes o servicios”.
Percepciones de la función social de las empresas
Adam Smith se
encuentra entre los primeros en teorizar al respecto. Para él una
empresa es la organización que permite la "internacionalización" de las
formas de producción: por un lado permite que los factores de producción
(capital, trabajo, recursos) se encuentren y por el otro permite la división del trabajo. Aún cuando para Smith la forma "natural" y eficiente de
tal organización era aquella motivada por el interés privado -por
ejemplo: «Es así que el interés privado y las pasiones de los individuos
los disponen naturalmente a volver sus posesiones (stock en el
original) hacia el empleo que en el caso ordinario son más ventajosos
para la comunidad»6 -
Smith propone que hay también una necesidad o área que demanda acción
pública: «De acuerdo al sistema de Libertad Natural, el Soberano sólo tiene tres deberes que atender, tercero, la obligación de realizar y conservar determinadas obras públicas y determinadas institucionespúblicas,
cuya realización y mantenimiento no pueden ser nunca de interés para un
individuo particular o para un pequeño número de individuos, porque el beneficio de
las mismas no podría nunca reembolsar de su gasto a ningún individuo
particular o a ningún pequeño grupo de individuos, aunque con frecuencia
reembolsan con mucho exceso a una gran sociedad» (op. cit p 490 (en
inglés) - estableciendo así las bases de lo que algunos han llamado la
“Teoría de la empresas públicas”.
El
razonamiento de Smith es que es el caso que hay ciertos bienes y
servicios cuya existencia o provisión implica beneficios que se
extienden a la comunidad entera, incluso a quienes no pagan por ellos
(ver Externalidad positiva enExternalidad). Esto da origen -en la percepción de Smith- al problema del polizón,
es decir, al problema de que los individuos de esa sociedad están en la
posición de beneficiarse, contribuyan o no a los costos.
Consecuentemente Smith propone que la manera apropiada y justa de
proveer y financiar esos bienes y servicios es a través de impuestos y empresas públicas. (ver op cit)
Bienes
y servicios que han sido generalmente considerados como incluibles en
la producción pública, en adición a los sugeridos por Smith, como la
“defensa” de la sociedad de otras sociedades, la “protección de los
ciudadanos de injusticia u opresión por otros”, la educación, algunos
caminos y obras públicas (especialmente faros, y algunas obras de defensa fluvial o marinas como espigónes; rompeolas, etc), obras de salud pública (incluyendo alcantarillas, etc), incluyen: redes o sistemas postales; ferroviarias y eléctricas, etc, y, en general, las que constituyen ya sea un monopolio natural o
requieren grandes inversiones (que exceden la capacidad de cualquier
inversionista real) o las que solo generan ganancia después de un largo
periodo, que excede las expectaciones -o incluso la vida- de
inversionistas potenciales.
Posteriormente, Paul Samuelson retoma esa
percepción de Smith para sugerir que la maximizacion del beneficio o
utilidad social se puede lograr satisfaciendo la famosa Condición de Samuelson, lo que ha llevado a algunos a sugerir una economía mixta. En las palabras de Joseph E. Stiglitz:
«El verdadero debate hoy en día gira en torno a encontrar el balance
correcto entre el mercado y el gobierno. Ambos son necesarios. Cada uno
puede complementar al otro. Este balance será diferente dependiendo de
la época y el lugar».
Desde otra perspectiva Max Weber llama
nuestra atención a los aspectos organizacionales de las empresas. Se ha
aducido que Weber sugiere una similitud entre las empresas modernas y
los sistemas burocráticos:
en ambos el ideal es la racionalización de actividades en aras del
resultado, con atención centrada en la eficiencia y productividad. En
ambas los “productores” no poseen los medios de producción, medios cuya
propiedad ha sido incrementalmente concentrada en las manos de una élite
directora, etc.11 Esto
se da contra un telón de fondo en el cual la consecución de ganancia
parece ser el valor supremo, un fin en sí mismo y no el medio para el
mejoramiento de la vida (ver La ética protestante y el espíritu del capitalismo).
Sin embargo para Thorstein Veblen -para
quien “el ‘sistema industrial moderno’ es una concatenación de procesos
que tienen mucho del carácter de un proceso mecánico único,
comprensivo, balanceado”.12 -
las grandes corporaciones no están primariamente interesadas en maximar
las ganancias a través de la producción y venta de productos o
servicios. El objetivo principal de los gerentes corporativos es maximar
el valor de sus inversiones. Para Veblen el capital de una empresa
incluye no solo elementos materiales sino también aspectos intangibles
-medido en el buen nombre o reputación de la empresa.
Ese análisis parece relevante para explicar la práctica de muchas grandes empresas modernas -por ejemplo: Goldman Sachs, Apple, Google etc- que no ofrecen o ofrecen solo sumas menores como dividendos a
sus accionistas, descansando primariamente en el aumento del valor de
las acciones para atraer y mantener inversionistas: «Sin embargo, al
final de la década de los noventa se promovió desde EEUU que, para las
empresas en bolsa, el criterio primordial para establecer el bonus
debería ser el llamado ‘valor para el accionista', es decir el
incremento del valor de la acción durante el período en cuestión. Eso
implicaba que la mejora de la acción estaba directamente relacionada con
la gestión de la compañía de manera que si subía el valor de la acción
era debido a una buena gestión.»
Wilhelm Röpke -junto a otros miembros del llamado "neoliberalismo alemán" (ver Ordoliberalismo)
quienes denunciaron lo que percibieron como excesiva matematizacion de
la economía, que llevaría a -en las palabras de Röpke- «la expulsión del
hombre de la economía»- parece extender esa sugerencia de Veblen. Para
Röpke el objetivo principal de las empresas es producir valor en su sentido moral:
«Es evidente que la satisfacción -de las necesidades del hombre- no
puede resultar ajena o indiferente al éxito o fracaso de la
productividad técnica. Sin embargo, hacer de la "producción de cosas" el
fin último de la economía desmerece de la condición humana de lo
económico. Para Röpke, el problema de fondo ha sido el encumbramiento de
una concepción materialista o utilitaria de
la vida, a lo que no fue ajeno el viejo liberalismo.». Para Röpke el
desarrollo de las empresas (y el desarrollo que las empresas producen)
depende de un telón de fondo valorico y el Estado debe producir un marco
legal que lo promueva, interviniendo si es necesario a fin de preservar
esos valores (ver Escuela de Friburgo).
Esta posición de Röpke dio origen a un fuerte debate interno en la Sociedad Mont Pelerin con los partidarios de la visión de Ludwig von Mises y Friedrich von Hayek,
lo que terminó con la renuncia de Röpke y algunos otros de los
“neoliberales alemanes”. R. Hartwell, único historiador de la Sociedad
hasta el momento, en el capítulo denominado “The Hunold Affair” de su
obra, describe así la situación: «Existían tres posibles conflictos en
estas aspiraciones: seguridad versus progreso, igualdad versus eficiencia, y solidaridad versus individualismo. Había algunos en la conferencia, como L. Von Mises, que tomaron una posición libertaria en
todos estos temas... otros como Röpke, creían que el sistema
competitivo sin controles podía destruir valiosas instituciones humanas.
Röpke defendió fuertemente la intervención agrícola, por ejemplo,
porque quería preservar las pequeñas granjas familiares como una forma
valiosa de vida. El deseo por seguridad que muchos de los participantes
aceptaban condujeron en algunos casos a propuestas intervencionistas –sugerencias
de controles agregados, salarios controlados por el gobierno, y
programas de apoyo a la agricultura, por ejemplo. Estas propuestas, sin
embargo, eran formuladas sin una justificación analítica adecuada y
fueron rechazadas vigorosamente por otros participantes, que enfatizaban
tanto su inefectividad como su carácter no-liberal.»
Se
puede agregar que, como es generalmente reconocido, la posición de
Röpke tuvo mucha influencia en la concretizacion de la llamada economía social de mercado,
posición que se beneficio mayormente -Alemania fue el mayor exportador a
nivel mundial hasta el 2009- de la implementación de las posiciones de
von Mises y von Hayek en EUA, país en el cual esas ideas contribuyeron
mayormente a la adopción de políticas de desregulacion que condujeron directamente al proceso de expansión económica de la segunda mitad del siglo XX conocido como globalización.
Sin embargo se ha alegado que esa misma desregulacion condujo también a
un sistema de corrupción empresarial que terminó con casos tales como
los de Enron, Bernard Madoff, etc, que a su vez llevaron a la crisis financiera de 2008.
Clasificación de las empresas
Existen
numerosas diferencias entre unas empresas y otras. Sin embargo, según
en qué aspecto nos fijemos, podemos clasificarlas de varias formas.
Dichas empresas, además cuentan con funciones, funcionarios y aspectos disímiles, a continuación se presentan los tipos de empresas según sus ámbitos y su producción.
Según las relaciones que mantengan con otras empresas y con los clientes
- Empresas aisladas o de lazo cerrado: se trata de un conjunto de empresas que son independientes del resto del mercado, por lo que solo dependen de sí mismas (Este hecho implica que todo el producto ha sido realizado por ellas mismas, desde la materia prima hasta el producto elaborado, sin utilizar ningún producto semielaborado). En la actualidad este modelo de empresa es prácticamente inexistente.
- Redes de empresas o empresas de lazo abierto: Unión temporal de empresas con unos objetivos comunes, en la que cada una aporta sus competencias principales para responder a las necesidades del mercado y mejorar la situación de competencia. En la actualidad, debido a la globalización es muy común encontrar empresas especializadas en un subproducto concreto que forma parte de un producto elaborado. De esta forma también existen empresas especializadas en comprar y ensamblar las distintas piezas del producto acabado
Según la actividad o giro
Las empresas pueden clasificarse, de acuerdo con la actividad que desarrollen, en:
- Empresas del sector primario.
- Empresas del sector secundario.
- Empresas del sector terciario.
- Empresas del sector cuaternario.
Una clasificación alternativa es:
- Industriales. La actividad primordial de este tipo de empresas es la producción de bienes mediante la transformación de la materia o extracción de materias primas. Las industrias, a su vez, se clasifican en:
- Extractivas. Cuando se dedican a la explotación de recursos naturales, ya sea renovables o no renovables. Ejemplos de este tipo de empresas son las pesqueras, madereras, mineras, petroleras, etc.
- Manufactureras: Son empresas que transforman la materia prima en productos terminados, y pueden ser:
- De consumo final. Producen bienes que satisfacen de manera directa las necesidades del consumidor. Por ejemplo: prendas de vestir, muebles, alimentos, aparatos eléctricos, etc.
- De producción. Estas satisfacen a las personas de uso de consumo final. Ejemplo: maquinaria ligera, productos químicos, etc.
- Comerciales. Son intermediarias entre productor y consumidor; su función primordial es la compra/venta de productos terminados. Pueden clasificarse en:
- Mayoristas: Venden a gran escala o a grandes rasgos.
- Minoristas (detallistas): Venden al por menor.
- Comisionistas: Venden de lo que no es suyo, dan a consignación.
- Servicio. Son aquellas que brindan servicio a la comunidad que a su vez se clasifican en:
- Transporte
- Turismo
- Instituciones financieras
- Servicios públicos (energía, agua, comunicaciones)
- Servicios privados (asesoría, ventas, publicidad, contable, administrativo)
- Educación
- Finanzas
- Salud
Según la forma jurídica
Atendiendo a la titularidad de la empresa y la responsabilidad legal de sus propietarios. Podemos distinguir:
- Empresas individuales: si sólo pertenece a una persona. Esta puede responder frente a terceros con todos sus bienes, es decir, con responsabilidad ilimitada, o sólo hasta el monto del aporte para su constitución, en el caso de las empresas individuales de responsabilidad limitada o EIRL. Es la forma más sencilla de establecer un negocio y suelen ser empresas pequeñas o de carácter familiar.
- Empresas societarias o sociedades: constituidas por varias personas. Dentro de esta clasificación están: la sociedad anónima, la sociedad colectiva, la sociedad comanditaria, la sociedad de responsabilidad limitada y la sociedad por acciones simplificada SAS.
- Las cooperativas u otras organizaciones de economía social.
Según su tamaño
No hay unanimidad entre los economistas a la hora de establecer qué es una empresa grande o pequeña, puesto que no existe un criterio único para medir el tamaño de la empresa. Los principales indicadores son: el volumen de ventas, el capital propio, número de trabajadores, beneficios, etc. El más utilizado suele ser según el número de trabajadores (siempre dependiendo del tipo de empresa, sea construcción, servicios, agropecuario, etc). Este criterio delimita la magnitud de las empresas de la forma mostrada a continuación:
- Micro empresa: si posee 10 o menos trabajadores.
- Pequeña empresa: si tiene un número entre 11 y 49 trabajadores.
- Mediana empresa: si tiene un número entre 50 y 250 trabajadores.
- Gran empresa: si posee entre 250 y 1000 trabajadores
Según su ámbito de actuación
En función del ámbito geográfico en el que las empresas realizan su actividad, se pueden distinguir:
- Empresas locales: son aquellas empresas que venden sus productos o servicios dentro de una localidad determinada.
- Empresas nacionales: son aquellas empresas que actúan dentro de un solo país.
- Empresas multinacionales: o empresas internacionales, son aquellas que actúan en varios países.
- Empresas Trasnacionales: las empresas transnacionales son las que no solo están establecidas en su país de origen, sino que también se constituyen en otros países, para realizar sus actividades mercantiles no sólo de venta y compra, sino de producción en los países donde se han establecido.
Según la cuota de mercado que poseen las empresas
- Empresa aspirante: aquélla cuya estrategia va dirigida a ampliar su cuota frente al líder y demás empresas competidoras, y dependiendo de los objetivos que se plantee, actuará de una forma u otra en su planificación estratégica.
- Empresa especialista: aquélla que responde a necesidades muy concretas, dentro de un segmento de mercado, fácilmente defendible frente a los competidores y en el que pueda actuar casi en condiciones de monopolio. Este segmento debe tener un tamaño lo suficientemente grande como para que sea rentable, pero no tanto como para atraer a las empresas líderes.
- Empresa líder: aquélla que marca la pauta en cuanto a precio, innovaciones, publicidad, etc., siendo normalmente imitada por el resto de los actuantes en el mercado.
- Empresa seguidora: aquélla que no dispone de una cuota suficientemente grande como para inquietar a la empresa líder.
Recursos y transacciones contables de la empresa
Toda empresa requiere una serie de recursos para su existencia y consecución de sus fines,estos recursos pueden ser: Humanos y Materiales. Los recursos humanos, la empresa los obtiene a través del proceso de reclutamiento y selección de personal y los recursos materiales, se obtienen mediante la aportación del dueño y además recurriendo a préstamos y créditos que le conceden otras personas ó entidades comerciales. Podemos concluir entonces, que los recursos materiales de la empresa los obtiene a través de dos fuentes: 1. Fuentes propias-Propietarios: aportaciones, utilidades 2. Fuentes ajenas- Acreedores: préstamos, créditos